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Inteligencias de otras dimensiones

Última actualización 20/04/2012@09:45:26 GMT+1

ENIGMAS

En las últimas décadas, la llamada teoría de las cuerdas ha conquistado las más prestigiosas facultades de física. Lo sorprendente es que dicha hipótesis se refiere a la existencia de universos paralelos que todavía somos incapaces de captar debido a nuestras carencias tecnológicas. El Universo no es plano (Palmyra, 2012), obra de reciente publicación de la cual extractamos este artículo, plantea la posibilidad de que entidades de esas otras dimensiones estén interfiriendo en nuestro mundo tridimensional, e incluso que nosotros podamos acceder a dichos planos diferentes de la realidad, bien de un modo accidental –debido a una serie de fenómenos anómalos incontrolables– o mediante la práctica de diferentes técnicas de control mental…

El misterio OVNI con todas sus intrincadas derivaciones, las apariciones de seres celestiales o la comunicación con entidades espirituales que dicen existir en el Más Allá son asuntos fascinantes que no solo han acaparado la atención de la opinión pública mundial, sino también de científicos de primer nivel. En apariencia, el origen de estos fenómenos es completamente diferente, sin embargo todos ellos presentan una serie de características comunes, lo que a muchos nos hace plantearnos una fascinante hipótesis: quizá la respuesta a dichos enigmas haya que buscarla en inteligencias procedentes de universos paralelos, las cuales toman una u otra forma –espíritus, extraterrestres, ángeles…– dependiendo del individuo o individuos ante los que se presenten. Esto implicaría, primero, que dichas entidades no serían quienes dicen ser. Y en segundo lugar, que tendrían la ­capacidad de manejar a su antojo el espacio–tiempo, de modo que los seres humanos las consideraríamos auténticos dioses omnipotentes. Si aceptamos lo anterior, la siguiente pregunta que debemos formularnos es: ¿Si seres de otras dimensiones tienen la capacidad de interactuar con nuestro mundo tridimensional, acaso no han podido dirigir la historia de la humanidad desde las sombras, manipulando las mentes de personas o colectividades sin dejar rastro de ello?
Estoy seguro de que lo anterior puede causar perplejidad en algunos lectores. Sin embargo, la física cuántica, la ciencia que estudia las partículas ­subatómicas –es decir, por debajo del nivel del átomo–, y más concretamente la llamada teoría del todo o teoría de cuerdas, apunta precisamente a la existencia de universos paralelos en los cuales –¿por qué no?– podría habitar alguna clase de inteligencia. Aceptada por la mayor parte de los físicos cuánticos, la teoría de cuerdas explicaría la esencia última de la materia e implicaría la existencia de esas otras dimensiones que estarían “conviviendo” con nosotros, pero que no podríamos captar con nuestros sentidos ni detectar con la tecnología disponible hoy en día. Eso sí, para conocer las bases de dicha hipótesis, que ha cambiado radicalmente la visión de los científicos sobre la ­realidad en la que vivimos, debemos retroceder algunas décadas en el tiempo.
(Continúa la información en ENIGMAS 197).

Miguel Pedrero